Olvídate del miedo innecesario.

Miedo. Hay tantas definiciones para una misma palabra.. Miedo a la soledad, miedo a la compañía, miedo escénico, miedo a no sentirse escuchado, a no sentirse querido, o a sentir que su opinión influye más de lo que debería sobre los demás. Miedo a sentirse infravalorado, a infravalorar a los demás, a no ser consciente de lo que hacemos, a sentir lo que no queremos sentir, y sobretodo el no poder dejar de hacerlo. Miedo a quedarse a solas con alguien a quien no sabríamos que decir, miedo a la opinión de los demás, a depender de la gente, de no saber que hacer si alguien te falta. Miedo a querer, y a sentirse demasiado querido, a hacer daño a quienes te rodean, miedo a decepcionar, y a sentirte decepcionado, de no dar la talla. Miedo de no sentirte orgulloso de algo de lo que deberías hacerlo, miedo a perder algo o a alguien.. ¿Pero sabéis que? Yo estoy segura que hay un miedo peor: El miedo a tener miedo de algo que se supone que no debería darte miedo. Y esto hace que me pregunte que, si tengo miedo, eso supone que realmente hasta yo dudo que eso suceda. Pero en fin, espero que esta vez la esperanza sea más fuerte que el miedo.